Juego de pelota mesoamericano

Juego de pelota mesoamericano
Otros nombres Juego de pelota
Primera competencia Alrededor de 1400 a. C. en Mesoamérica
Características
Miembros por equipo 7 participantes
Género Masculino
Categoría Deporte en equipo
Accesorios Pelota de caucho
Pelota Esférica
Meta Aro de piedra en vertical
Juego de pelota en Monte Alban.
Marcador del juego de pelota, Chichén Itzá.

El juego de pelota mesoamericano (en náhuatl: tlachtli u ollamalistli, en maya clásico: pitz) fue un deporte con connotaciones rituales y bélicas, jugado desde el año 1400 a. C.[1]​ por los pueblos precolombinos de Mesoamérica; se practicaba tanto en la vida cotidiana como en celebraciones religiosas. Durante los milenios de su existencia, el deporte ha conocido distintas versiones en diferentes lugares. Aparentemente cumplía la función de resolver conflictos de diversa naturaleza: pleitos por tierras, tributo, controles comerciales y otros.

Las reglas del juego de pelota, si acaso las había explícitamente, no se conocen. A juzgar por su descendiente, ulama, eran probablemente similares al deporte del raquetbol,[2]​ donde el objetivo es mantener la bola en juego (algunos historiadores poco fiables hablan del uso de una cabeza), si se llegaba a caer la pelota era una mala señal ya que para muchos historiadores la pelota era un símbolo que hacía alusión al Sol.

Los aros de piedra son una adición tardía al juego. Esta adición cambió el juego por completo, ya que se podía conseguir una victoria inmediata metiendo la pelota en el aro, o se podían conseguir puntos simplemente si la pelota tocaba el aro.[3]​ La pelota de hule en movimiento representaba las trayectorias de los astros sagrados: Sol, Luna y Venus. El ganador del juego era protegido y apoyado por los dioses.

No se trataba de solo un juego: era un ritual religioso que simbolizaba el que Huitzilopochtli vencía a su hermana la luna para dar lugar al amanecer. En la zona de Monte Albán, el juego se desarrollaba a nivel del piso de la cancha, se golpeaba la pelota con la cadera, codos y rodillas para hacer pasar la pelota de un lado a otro. Los muros inclinados a los lados de la cancha se cubrían con una gruesa mezcla de cal para crear una superficie que hiciera regresar la pelota al campo de juego. Generalmente las canchas se encontraban en un nivel más bajo que el resto de las ciudades ya que era una representación del inframundo.

En la versión más difundida del juego, los jugadores golpeaban la pelota con las caderas, codos y rodillas del lado derecho del cuerpo. Otras versiones permitían el uso de los antebrazos, raquetas, o la manopla (piedra de mano). La pelota estaba hecha de caucho y pesaba hasta 4 kg, aunque el tamaño de la pelota difería mucho en el tiempo o según la versión del juego, asimismo que rango de jugadores eran.

El juego tenía importantes aspectos rituales y los principales partidos formales del juego de pelota eran eventos rituales. El deporte se jugaba también de manera informal, para la recreación de los niños e incluso de las mujeres.[4]

Campos del juego de pelota fueron encontrados en toda Mesoamérica, hasta el sur de Nicaragua, y posiblemente tan al norte como el actual Arizona en los Estados Unidos.[5]​ Estos campos de juego de pelota varían considerablemente en tamaño, pero todos tienen largas pistas estrechas con paredes laterales utilizadas para rebotar la bola.

  1. Véase Hill, Blake and Clark (1998); Schuster (1998).
  2. Schwartz.
  3. The Seventy Great Inventions of the Ancient World por Brian M. Fagan
  4. La principal prueba de que había peloteras femeninas consiste en una gran cantidad de figurillas que datan de la época formativa, al parecer de mujeres con un taparrabos pelotero y quizá otros equipos (véase esta foto de una figura femenina de cerámica con el vestido de pelotero. Xochipala, 1000 - 800 a. C. Altura aproximada 18 cm.). En su libro The Sport of Life and Death, el editor Michael Whittington menciona que: «[por consiguiente] parece razonable que las mujeres también participaron en el juego - tal vez en equipos completamente femeninos - o que participaron en una ceremonia aún por entender que se llevaba a cabo en el campo del juego de pelota.» (p. 186). En el mismo libro, Gillett Griffin afirma que a pesar de que estas figurillas sean «interpretados por algunos como siendo mujeres, en el contexto de la antigua sociedad mesoamericana la cuestión de la presencia de jugadores femeninos, y su papel en el juego, todavía esta siendo discutida.» (p. 158).
  5. La pruebas de juegos de pelota entre los Hohokam no son aceptadas por todos los investigadores e incluso los proponentes admiten que los juegos de pelota de los hohokam se distinguen significativamente de los de Mesoamérica: son oblongas con una superficie cóncava (en vez de plana). Véase el artículo de Wilcox y la foto al final de este artículo.

From Wikipedia, the free encyclopedia · View on Wikipedia

Developed by Tubidy